(Noticia procedente de Heraldo de Aragón)

Docentes del CEIP Francisco de Goya y del IES Emilio Jimeno de Calatayud han viajado hasta Helsinki para conocer, de primera mano, el modelo educativo de las escuelas finlandesas.

Del 5 al 12 de octubre de 2019, tres docentes del CEIP Francisco de Goya y dos del IES Emilio Jimeno, de Calatayud (Zaragoza), visitamos varios centros educativos de Helsinki (Finlandia), en el marco del Programa Erasmus plus. El objetivo de estas visitas ha sido obtener una visión práctica y presencial del sistema educativo finlandés, que permita recoger ideas y propuestas que puedan ser aplicadas, después, en nuestros centros.

La autonomía, responsabilidad, flexibilidad y confianza mutua son aspectos clave que destacan en todos los centros visitados. La educación tiene como elemento esencial el alumnado, potenciando el aprendizaje autónomo, ya que toma sus propias decisiones referentes a su forma de aprender a lo largo de la jornada escolar. Se ha observado que el papel del docente no es tan activo como en nuestro sistema educativo, puesto que no existe ese grado de empatía y cercanía que nos caracteriza.

Planchar, coser y tejer

Los colegios imparten sus clases potenciando los aspectos prácticos frente a los teóricos, haciendo especial énfasis en el aprendizaje dirigido a la resolución de problemas de la vida cotidiana, así como en la adquisición de otras habilidades prácticas que no se suelen impartir en nuestro país, como planchar, coser y tejer.

El número de alumnos por aula es muy similar al de los centros de Calatayud, pero disponen de un gran número de medios humanos y materiales. A modo de ejemplo, cabe señalar que existe un gran despliegue de medios informáticos, variedad de material escolar, dirigido a la adquisición de competencias básicas para el desempeño de tareas de la vida cotidiana, así como personal propio sanitario y auxiliar, que colabora con el profesorado.

Destaca la libertad con la que alumnado se desplaza por los centros, entrando y saliendo de clase cuando lo considera, y el uso de dispositivos móviles, tanto en el aula como en las zonas comunes, bajo su propia responsabilidad.

La metodología utilizada no difiere notablemente de la que se desarrolla en nuestro país. Puntualizando que una de las diferencias en este aspecto se encuentra en la gran variedad metodológica que se aplica en nuestros centros.

A modo de conclusión, la sociedad finlandesa favorece y confía en la labor de su profesorado. Los docentes trabajamos de manera similar en ambos países, si bien existen diferencias con respecto al interés y actitud hacia el aprendizaje por parte del alumnado.